Por esto, le brillan los ojos cuando dice que anhela darle la primera medalla de oro al Meta en Juegos Nacionales 2023, y con mayor alegría desea celebrar para Colombia un título mundial.
Por ratos es tímido, pero siempre determinado, habla fuerte, marcado y es muy cuidadoso con las palabras que usa para explicar la actividad que se esmera por desarrollar.
Es recreacionista en el IMDER y, además, es nadador profesional y profesor de natación, y la mayoría de sus compañeros lo describen como educado, responsable y muy amable.
Se trata de Luis Fernando Cantillo Rodríguez, el villavicense que representará a la ciudad en el Mundial de Natación, modalidad bialetas, del 20 al 23 de julio, en Cali. Nació el 21 de octubre de 1998 en Villavicencio, es un joven trabajador, disciplinado y sueña conseguir muchos triunfos bajo el agua y con sus aletas bien puestas.
Lleva 8 años practicando de forma profesional la natación, aunque en realidad practica desde los 11 años en la modalidad clásica, pero tuvo que parar por una misteriosa alergia que le producía el agua en las piscinas. Esta pausa lo tuvo lejos de la práctica alrededor de 4 años y, sin embargo, como buen villavicense no perdió la esperanza y un día común lo volvió a intentar.
En efecto, la alergia extrañamente desapareció y Fernando nuevamente se puso su gorro, snorkel y fue al fondo con sus aletas en pies.
Desde que empezó a entrenar este deporte tenía la certeza de que le iría bien, pues, con tan solo 10 años, en su primera participación consiguió dos medallas de oro y dos de plata en natación convencional, en los Juegos Nacionales Girardot 2012.
Así lo sigue haciendo cada día hasta ahora. Su alarma le suena en la mañana muy temprano y él se prepara para iniciar su extensa, pero alegre jornada. En la primera parte del día se pone su camisa azul para producir sonrisas a cientos de niños y niñas con actividades recreo-lúdicas en los colegios y barrios de la ciudad.
Más tarde, se sube a su AKT 150 para ir almorzar y recoger sus implementos de entreno, para llegar hacia las 3:45 de la tarde al Complejo Deportivo José Eustasio Rivera. Así, 15 minutos después, ya está en el taco de salida para enjabonar sus pies, reducirlos a sus particulares “alas” y, enseguida, ir pileta abajo.
El sueño de representar al departamento y a Villavicencio sigue en pie y cada día más cercano, tan cercano como esta él del 1° lugar del ranking nacional de las actividades subacuáticas, pues sostiene una marca de 44 segundos y 29 milésimas en 100 metros, a solo 13 milésimas de su contendiente.
El nadador villavicense aspira a conseguir un nuevo récord en el mundial en el que competirá en unos meses, pero, además, busca su primera final en este evento de talla mundial.
"Estoy trabajando, desde que quise clasificar, como si ya estuviera clasificado, porque con mi entrenador llegamos a la conclusión de que si llegaba a clasificar debía competir con los mejores del mundo”, afirma.
Y luego reitera, para que quede claro: “Entonces qué mejor que entrenar como si ya estuviéramos clasificados y fuéramos a competir con los mejores del mundo".
